
Anda y …¡MOTÍVATE!
Si has pasado por momentos difíciles y verdaderamente horrendos y éstos han secado y desaparecido toda la dulzura que solías ser, debes recordar que, tras la tormenta, Dios viene con mayor bendición y grandes enseñanzas para hacer algo mejor de ti. No permitas que se aleje tu esencia.
¡La promoción a una mayor revelación está por llegar!
Anda y …¡MOTÍVATE! a andar en FE y en VICTORIA.

¿Has soñado alguna vez que puedes volar? Desde mi niñez, y de forma consistente, he soñado con que puedo volar.
Tanto era mi anhelo de volar que en una ocasión me amarré una toalla al cuello tipo Superman y me lancé de la parte alta de un árbol. En otra ocasión, abrí un paraguas al estilo Mary Poppins y me tiré de un techo con la esperanza de salir volando, pero sólo logré caer al suelo y golpearme.
Ya de adulta acepté la invitación de una amiga de tirarme en paracaídas a 13,000 pies de altura desde un avión en Sacramento, California. Al conocer a mi instructor, éste me explicó, rápidamente, como íbamos a realizar juntos esa hazaña. Estaba tan emocionada que no le formulé ninguna pregunta que me indicara su estado de salud física, mental o emocional; ni puse en duda su capacidad profesional como paracaidista. En fin, le estaba confiando toda mi vida a un perfecto extraño, sin dudas, ni preguntas.
Cuando subí al avión y alcanzamos la altura correcta, siento a mi instructor uniendo su arnés al mío en mi espalda, y que me dice con voz serena pero firme: «Liz, vamos a la puerta, dobla tus rodillas, cruza tus brazos sobre el pecho, espera mi señal y en 7 segundos nos tiramos.»
Cuando nos movemos hacia la puerta y miro el vacío que me esperaba, fue entonces cuando recordé las preguntas que no había hecho. Y antes que pudiera retractarme, me encontraba con las manos abiertas planeando por los aires, conquistando el espacio, desafiando la gravedad, venciendo mis miedos y alcanzando una meta.
¡Ese día recibí la lección de fe más importante de mi vida! Pensé: Si pude confiarle toda mi vida a un total extraño que no conocía, que no recuerdo su nombre y tal vez nunca veré; y peor aún, a quien no le hice una sola pregunta, ni dudé de él, ¿Cómo no podré confiarle mi vida a Dios (a quien conozco y creo) y como no lanzarme con ÉL en una aventura de fe, sin hacerle una pregunta, ni dudar de su capacidad de conducirme a conquistar nuevos espacios, desafiar la lógica humana , vencer mis temores y alcanzar mi propósito en la vida?
Dios te está invitando a tener una aventura de fe con ÉL
Por favor…
* Sube al avión de tus sueños.
* Escucha sus instrucciones y no dudes ni hagas preguntas.
* Deja que te lleve en sus espaldas.
* Dobla tus rodillas en oración y cruza tus brazos aferrándote a sus promesas.
* Espera la señal, lánzate con fe y conquista tu propósito divino en esta Tierra.
ÉL te dice: «Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente. No temas, ni desmayes, que Yo Jehová tu Dios estaré contigo dondequiera que vayas»
Josué 1:9
#LEPMinistries