
Anda y …¡MOTÍVATE!
Es importante saber quien te ha llevado al lugar donde estás.
Porque cuando tu sabes que ha sido DIOS, no importa la adversidad, no importa lo duro, no importa lo difícil, tienes la certeza que ÉL te va a sostener, ÉL te va a proveer, que ÉL te va a sanar, ÉL te va a restaurar.
Por lo tanto, no tiene que ver con el lugar donde te encuentras, tiene que ver con lo que DIOS VA A HACER POR TI EN ESE LUGAR.
Aférrate a DIOS y glorifícalo en la prueba. El tiene grandes propósitos. Solo confía.
Anda y … ¡MOTÍVATE! Y abre tu corazón a una nueva revelación de entendimiento.

Aprendí que existe lo que se llama conversaciones cruciales. Son esas conversaciones que evitas tener cuando hay situaciones tensas y prefieres quedar en silencio en vez de manejarlas al momento. El dejar una conversación crucial de lado, y no aclarar los temas en el momento, puede llegar a convertir algo relativamente sencillo en algo grave con serias consecuencias como separaciones de familias y amistades; en divorcios cuando se trata de parejas; en litigios legales muy onerosos, cuando se trata de empresas.
Para que este tipo de conversación sea exitosa debe hablarse del corazón; de lo que se siente y de lo que es tu experiencia al momento. No te vayas por lo superficial y no desvíes la razón por el sentimentalismo.
Hace falta valor, conciencia y amor. En muchas ocasiones es el orgullo el que causa que se pierdan relaciones de familias, de parejas y de trabajo.
Clama sabiduría a Dios y analiza las relaciones en tu vida y verifica si es necesario tener una conversación crucial. Luego de hacerlo notarás lo mucho que ganaste y que valió la pena salvar la relación.
Anda y … ¡MOTÍVATE! a ser proactivo y solucionar las situaciones a tiempo con sabiduría.

Es tu actitud lo que demarca la diferencia al enfrentar los momentos difíciles de la vida. O enfrentas los problemas partiendo del plano de víctima y de queja lamentándote el resto de tu vida por lo que pasó o los enfrentas partiendo de la perspectiva de responsabilidad, lo tomas como aprendizaje y motivación para seguir creciendo y subir de nivel.
¡La decisión es tuya!
Anda y … ¡MOTÍVATE! a decidir la actitud que vas a llevar hoy: de víctima o ¡en VICTORIA!

Anda y… ¡MOTÍVATE!
Es en el quebrantamiento cuando Dios permite que ciertas áreas de nuestra vida sean pulidas para poder llegar a ser lo que ÉL desea. ÉL nos quiere llevar a donde ÉL nos ve; un nivel mayor al que jamás imaginaste. Mayor revelación, mayor caridad, mayor misericordia, mayor influencia, mayor comprensión.
Permíteselo y no te quejes cuando llegue la prueba. Confía, cree y verás la renovación de Dios en tu vida.
Anda y … ¡MOTÍVATE! a ver con tus propios ojos lo que Dios tiene para ti.

Anda y … ¡MOTÍVATE!
A veces nos sentimos sin rumbo o perdidos en las decisiones que se deben tomar; no ves la luz al final del camino. Es en ese momento que te debes DETENER, CLAMAR y CONFIAR en Dios.
Dios pone cada pieza en su lugar en su momento; no en el tuyo. Él ve el macro en forma de rompe cabezas y te da cada pieza poco a poco hasta que va convirtiéndose en una obra maestra. Y aunque no lo veas hasta el final, debes andar como viéndolo, confiando en que te lo mostrará claramente y será más excelente de lo que imaginaste.
Anda y … ¡MOTÍVATE! a caminar confiando en que ÉL está obrando a tu favor.

Anda…y ¡MOTÍVATE!
Si quieres lo mejor, debes trabajar por ello. Al hacerlo, con Dios de frente, encontrarás el camino que ÉL quiere para ti.
Anda y…¡MOTÍVATE! a un caminar de FE y ACCIÓN.

Anda y …¡MOTÍVATE!
Si has pasado por momentos difíciles y verdaderamente horrendos y éstos han secado y desaparecido toda la dulzura que solías ser, debes recordar que, tras la tormenta, Dios viene con mayor bendición y grandes enseñanzas para hacer algo mejor de ti. No permitas que se aleje tu esencia.
¡La promoción a una mayor revelación está por llegar!
Anda y …¡MOTÍVATE! a andar en FE y en VICTORIA.